Hoy quiero hablar de una cosa, que aunque no la veamos y no pensamos demasiado en ella, todos vamos a pasar por ella. Pobres, altos, pequeños, flacos, ricos, gordos, hombres, mujeres....Todos, sin excepción. Esa cosa es, como habréis imaginado, la muerte.
La parca, el sueño eterno, la dama de la guadaña, la noche más larga....Tiene infinidad de nombres y motes. La muerte forma parte de la vida. Hace años, cuando era más joven, me daba mucho miedo pensar en la muerte. Qué habrá después, seguiremos pensando o sintiendo algo, será cierto lo del cielo y el infierno.....Me hacía infinidad de preguntas, sin recibir ninguna respuesta , evidentemente.
Con el paso del tiempo, he dejado de plantearme todas esas cuestiones. ¿ Para qué ? La verdad es que todos moriremos, yo moriré, y, de eso, no me puede salvar nada ni nadie. Así que no voy a perder el poco tiempo que tenemos para pasar por este mundo, haciéndome todas esas preguntas. Cuando tenga que llegar, llegará. Mejor lo más tarde posible, está claro. Y que llegue también lo más tarde posible a por todos mis seres queridos. No quiero ni pensar en no volver a ver a alguno de ellos. Debe ser horrible...
Lo que a veces pienso es en que sería genial tener cada uno, nuestro propio " cielo" particular. Y que estuviera intercomunicado con el resto de "cielos" de la gente que queremos. Sería estupendo pasar toda la eternidad junto a ellos.
Dicen que la vida es un prestamo de la muerte y que, tarde o temprano, vendrá a reclamar lo que le pertenece. Por mí, puede venir cuando quiera. Ya no le tengo ningún miedo.....